3 dic 2010
Por Alejandro Contreras
El origen de INCEPTION (2010) se remonta al año 2001, en concreto a 80 folios que presentó Christopher Nolan a la Warner Bros con una historia sobre ladrones de sueños, incubación de ideas y sueños lúcidos. El mismo director reconoce que el texto aún estaba verde, y tal vez demasiado reciente el estreno de dos películas como THE MATRIX (1999) y THE THIRTEENTH FLOOR (1999) que planteaban mundos que podrían no ser reales, para que fuera rechazado por la productora de cine.
Mientras seguía afianzando su carrera como director con películas de alto presupuesto como BATMAN BEGINS (2004) y THE PRESTIGE (2006), seguía revisando ese texto hasta, tras un intenso pulido durante 6 meses dedicado en cuerpo y alma, que en febrero del 2009 la Warner Bros compró el guión. Y claro como al soñar no hay límites, Nolan quería un gran presupuesto, poder rodar en 6 países distintos y un elenco de actores de lujo. Los excelentes resultados en taquilla y crítica de THE DARK KNIGHT (2008) le permitieron arrancar este ambicioso proyecto.
De una manera magistral arranca la película y rápidamente nos familiarizamos con una serie de términos como extractor, tótem o limbo que se redefinen para crear un tablero de juego. Cada personaje adopta un rol que fácilmente asociamos y conseguimos seguir la pista hasta cinco niveles de realidad distintos. En PRIMER (2004) era imposible seguir la acción sin usar lápiz y papel mientras veias la película en repetidas ocasiones, pero al igual que en LOS CRONOCRÍMENES (2007) en INCEPTION (2010) la compleja estructura se puede seguir muy facilmente. Esto no admite discusión.
Puedo entender que haya quién entienda que Nolan ha presentado una película tramposa, aunque yo crea que nos ha ofrecido las piezas para que cada espectador conforme su propia película. INCEPTION (2010) no es un blockbuster al uso, pero tampoco es una película de autor. Ese punto intermedio puede defraudar a aquellos puristas que no entienden las escenas de acción, o aquellos que se mareen con tanto lío. Pero realmente la gracia de la película está en esa fusión con escenas que te dejan con la boca abierta mientras tu mente trata de entender qué esta ocurriendo. Una fotografía impecable en escenas tan sobresalientes como la del hotel con gravedad cero, el entrenamiento de Ariadne con las calles de Paris o el frio limbo.
El primer actor en subirse al proyecto es Leonardo Di Caprio. Es un actor de primera fila que raramente defrauda, pero tampoco su trabajo sobresale frente a otros suyos. El resto de actores consiguen dar vida a sus personajes pero sin destacarse ninguno. Con una excepción, Marion Cotillard cuyas apariciones dan fuerza a la historia. Ella se subió al proyecto cuando el tema de Edith Piaf ya había sido seleccionada, así que la coincidencia de ella con la canción más famosa del personaje que le dió su Oscar ya no se pudo evitar.
Un capítulo especial se merece la grandísima banda sonora que ha compuesto Hans Zimmer para la película que nos acompaña durante los 146 minutos de duración de la misma y que consiguen emocionar y transmitir más que los propios personajes. Hasta las recreaciones de un tema tan trillado como el NON, JE NE REGRETTE RIEN consigue sonar a nuevo.
Nolan no ha hecho una película perfecta, y para muchos les puede sonar a un nuevo refrito de otras películas, además de que hay muchos peros del guión que el director podría enmascarar como que así lo han soñado alguno de los durmientes. Pero realmente ha conseguido una película que no se acaba cuando la peonza gira por ultima vez, sino que querrás contrastar con otros si todo es un sueño, si la peonza se termina cayendo o si los niños usan ropas distintas en la última escena a la escena recursiva.
Es curioso que las primeras impresiones de las películas fueron tan buenas que auparon a INCEPTION (2010) con un 9.0 en IMDB.com (ocupando así el sexto lugar en el histórico de esa web con más de 240.000 votos). Tantas buenas críticas consiguió que la segunda oleada de espectadores dijeran que "no era para tanto". Pero ahora que consigo terminar mi crítica tres meses después de haberla visto, creo que el resultado es mucho más redondo que con THE DARK KNIGHT (2008).
Estoy seguro de que la segunda vez que la vea la disfrutaré incluso más que la primera vez. Tanto que me atrevo a decir que para mi entender es la película más alucinante del 2010. ¡Ahí queda eso!
El origen de INCEPTION (2010) se remonta al año 2001, en concreto a 80 folios que presentó Christopher Nolan a la Warner Bros con una historia sobre ladrones de sueños, incubación de ideas y sueños lúcidos. El mismo director reconoce que el texto aún estaba verde, y tal vez demasiado reciente el estreno de dos películas como THE MATRIX (1999) y THE THIRTEENTH FLOOR (1999) que planteaban mundos que podrían no ser reales, para que fuera rechazado por la productora de cine.
Mientras seguía afianzando su carrera como director con películas de alto presupuesto como BATMAN BEGINS (2004) y THE PRESTIGE (2006), seguía revisando ese texto hasta, tras un intenso pulido durante 6 meses dedicado en cuerpo y alma, que en febrero del 2009 la Warner Bros compró el guión. Y claro como al soñar no hay límites, Nolan quería un gran presupuesto, poder rodar en 6 países distintos y un elenco de actores de lujo. Los excelentes resultados en taquilla y crítica de THE DARK KNIGHT (2008) le permitieron arrancar este ambicioso proyecto.
De una manera magistral arranca la película y rápidamente nos familiarizamos con una serie de términos como extractor, tótem o limbo que se redefinen para crear un tablero de juego. Cada personaje adopta un rol que fácilmente asociamos y conseguimos seguir la pista hasta cinco niveles de realidad distintos. En PRIMER (2004) era imposible seguir la acción sin usar lápiz y papel mientras veias la película en repetidas ocasiones, pero al igual que en LOS CRONOCRÍMENES (2007) en INCEPTION (2010) la compleja estructura se puede seguir muy facilmente. Esto no admite discusión.
Puedo entender que haya quién entienda que Nolan ha presentado una película tramposa, aunque yo crea que nos ha ofrecido las piezas para que cada espectador conforme su propia película. INCEPTION (2010) no es un blockbuster al uso, pero tampoco es una película de autor. Ese punto intermedio puede defraudar a aquellos puristas que no entienden las escenas de acción, o aquellos que se mareen con tanto lío. Pero realmente la gracia de la película está en esa fusión con escenas que te dejan con la boca abierta mientras tu mente trata de entender qué esta ocurriendo. Una fotografía impecable en escenas tan sobresalientes como la del hotel con gravedad cero, el entrenamiento de Ariadne con las calles de Paris o el frio limbo.
El primer actor en subirse al proyecto es Leonardo Di Caprio. Es un actor de primera fila que raramente defrauda, pero tampoco su trabajo sobresale frente a otros suyos. El resto de actores consiguen dar vida a sus personajes pero sin destacarse ninguno. Con una excepción, Marion Cotillard cuyas apariciones dan fuerza a la historia. Ella se subió al proyecto cuando el tema de Edith Piaf ya había sido seleccionada, así que la coincidencia de ella con la canción más famosa del personaje que le dió su Oscar ya no se pudo evitar.
Un capítulo especial se merece la grandísima banda sonora que ha compuesto Hans Zimmer para la película que nos acompaña durante los 146 minutos de duración de la misma y que consiguen emocionar y transmitir más que los propios personajes. Hasta las recreaciones de un tema tan trillado como el NON, JE NE REGRETTE RIEN consigue sonar a nuevo.
Nolan no ha hecho una película perfecta, y para muchos les puede sonar a un nuevo refrito de otras películas, además de que hay muchos peros del guión que el director podría enmascarar como que así lo han soñado alguno de los durmientes. Pero realmente ha conseguido una película que no se acaba cuando la peonza gira por ultima vez, sino que querrás contrastar con otros si todo es un sueño, si la peonza se termina cayendo o si los niños usan ropas distintas en la última escena a la escena recursiva.
Es curioso que las primeras impresiones de las películas fueron tan buenas que auparon a INCEPTION (2010) con un 9.0 en IMDB.com (ocupando así el sexto lugar en el histórico de esa web con más de 240.000 votos). Tantas buenas críticas consiguió que la segunda oleada de espectadores dijeran que "no era para tanto". Pero ahora que consigo terminar mi crítica tres meses después de haberla visto, creo que el resultado es mucho más redondo que con THE DARK KNIGHT (2008).
Estoy seguro de que la segunda vez que la vea la disfrutaré incluso más que la primera vez. Tanto que me atrevo a decir que para mi entender es la película más alucinante del 2010. ¡Ahí queda eso!
Labels: INCEPTION (2010), Oscars 2011
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