11 may 2012
Por Alejandro Contreras.
Este cuarto largometraje que dirige el actor George Clooney parte de una obra teatral cuyo texto pertenece a Beau Willimon, Farragut North. Clooney no sólo se encarga de la dirección y de interpretar a uno de los protagonistas, sino que además participó en las tareas de adaptación del guión. Trabajo por el cuál consiguió la unica nominación de esta película en los pasados Oscars 2012 junto a Grant Heslov y el propio autor de la obra original Beau Willimon.
El 31 de agosto del pasado año THE IDES OF MARCH (2011) fueron la película que inauguró la 68ª edición de la Mostra de Venecia, siendo una de las favoritas para los premios de esa edición, aunque finalmente sólo consiguió el premio Brian Prize a la película. Desde entonces ha sido una de las más anunciadas en las diferentes ceremonias, consiguiendo hasta 4 nominaciones para los Globos de Oro 2012, una nominación al BAFTA como actor secundario a Phillip Seymour Hoffman, la mencionada anteriormente al Oscar al mejor guión adaptado e incluso fue considerado por el sindicato de productores norteamericanos como una de las mejores películas del 2011. Daba la sensación de que George Clooney volvía a la senda de GOOD NIGHT, AND GOOD LUCK (2005) tras el resbalón de LEATHERHEADS (2008).
En el calendario romano los idus se correspondían con los días de buen augurio. Normalmente eran el día 13 de cada mes, a excepción de marzo, mayo, julio y octubre donde el idus de ese mes se pasaba al día 15. Con lo cual "los idus de marzo" se refiere exactamente al quince de marzo, día que pasó a la historia y a las efemérides por ser el día en el que Julio Cesar fue asesinado, a pesar de que un vidente le avisó del grave peligro que corría su vida durante los idus de marzo. De ahí nació la famosa frase "cuidate de los idus de marzo" que usaron Shakespeare entre otros autores, y que sirve para renombrar a la adaptación cinematográfica de la obra original de Beau Willimon.
George Clooney lleva consigo asociada la etiqueta de "inteligente" y "comprometido", y este proyecto le viene como anillo al dedo. De alguna manera nos lleva al particular calvario que vive un joven encargado de la campaña política de un gobernador, y su pérdida de la inocencia según se va acercando a cotas más altas de poder. La mediocridad de la clase política y la facilidad para la corrupción son parte de una historia que denuncia el mal uso que a niveles medios de política se está realizando al día de hoy.
George Clooney se ha reunido con los mejores. Un lujo contar con Ryan Gosling, Paul Giamatti o Phillip Seymour Hoffman. Además cuenta con una envecejida Marisa Tomei, con Jeffrey Wright y una enigmática Evan Rachel Wood con el personaje más ambiguo de la historia, y hasta Max Minguella (irreconocible tras su paso por ÁGORA (2008)). Para que se luzcan hay multitud de escenas de fuertes diálogos entre dos, y en esas conversaciones es donde el talento de estos intérpretes sobresale más. Si a esto le sumamos un guión muy sólido, el resultado no puede ser malo.
Pero tampoco es especialmente brillante. La historia se sigue bien, los personajes son bastantes creibles e incluso la película va suministrando la información en dosis para aumentar el interés in-crescendo del final. Pero al resultado tan lleno de buenas intenciones y que cuenta con lo mejor de cada casa, no es sobresaliente. Le falta brillo, fuerza. El guión nos cuenta una historia mil veces vista, y cuya denuncia nunca viene mal, pero es una senda que ya hemos visto en muchas ocasiones en el cine. Clooney es mejor actor cuando está bien dirigido, y con tantas ocupaciones en esta película, George no ha conseguido que su protagonista deslumbre como si lo hace Ryan Gosling.
THE IDES OF MARCH (2011) a pesar de sus buenas intenciones, de contar con buenos profesionales, no ha pasado de un aprobado por los pelos. De una historia que podría haber sido mucho más grande que la que se nos presenta, y que aunque en ningún momento se hace aburrida, si es que le falta algo. Ya sea un final aún más doloroso, más acción de por medio, o algún giro más en el guión para descolocar al personal. Una radiografía de la actual escena política norteamericana que puede causar censura en Estados Unidos y tal vez en otros países. Podría haber sido una de las mejores del año, pero se queda en un entretenimiento más como cualquier otro.
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