23 feb 2011

Por Alejandro Contreras

Ree (Jennifer Lawrence) a sus 17 años es quién está sacando adelante a sus dos hermanos pequeños, Sonny (Isaiah Stone) y Ashlee (Ashlee Thompson), además de tener que cuidar a su madre que está en un estado catatónico y que ni siquiera puede hablar. Con toda esta responsabilidad sobre ella, Ree se ha visto obligada a aparcar sus estudios y renunciar a su sueño de convertirse algún día en militar. Apenas tienen ingresos y sobreviven con las atenciones que sus vecinos de los Orzaks tienen con ellos.

Como si no tuvieran una situación complicada, el sheriff del pueblo se acerca a la casa donde vive Ree con su familia. Le informa que tras la detención a su padre, Jessup, por su implicación en fabricación de drogas, él puso como fianza la propiedad de la casa donde viven. A una semana del comienzo del juicio, nadie sabe dónde está y si no aparece, perderán la casa.

A Ree le horroriza la idea de que se terminen viendo en la calle sin un techo donde cobijarse, y se pone manos a la obra en buscar a su padre. Va visitando a viejos amigos de su padre, familiares y a vecinos, pero nadie sabe nada. Sus preguntas resultan bastante incómodas y comienza a recibir amenazas para que deje de buscar a su padre o se arrepentirá.

Las amenazas se terminan por hacer realidad tras la visita a uno de los patriarcas de la región, donde las mujeres de la casa le dan una soberana paliza. La aparición del hermano de su padre, Teardrop (John Hawkes), le salva de que la situación vaya a mayores y comenzará a contarle qué hay detrás de la desaparición de su padre.

Para poder entender bien lo que ocurre en WINTER'S BONE (2010) necesité visionarla un par de veces. En el primer visionado se me antojó como una aburrida historia de una chica en busca de su padre en una zona tan deprimida como deprimente, tanto por su pobreza como por su falta de escrúpulos. Según iba avanzando fui dándome cuenta que había mucho más de lo que parecía a priori, y me di cuenta que había que agudizar bastante y poner todos los sentidos para poder entender y sacarle el máximo provecho a la historia. Reconozco que el inglés tan cerrado no ayudó mucho, y menos la gripe que me tiene K.O., pero al verla por segunda vez he podido disfrutarla y reconocer la gran película que hay detrás.

La novela original de Daniel Woodrell que ha sido adaptada por Anne Rosellini y la propia directora de la cinta, Debra Granik, nos lleva a un escenario tan particular como la zona rural de las montañas Ozarks en Missouri. Lo que bien podría haber sido materia de telefilm, termina siendo un híbrido de novela negra con western lleno de pequeños matices y pistas que permite al espectador ir entendiendo la historia que se nos presenta. Algunas líneas de diálogo son esenciales para ir entiendo un enigma que en la pantalla no se nos va a mostrar la solución de forma explícita, sino que el espectador tendrá que darle vueltas hasta poner cada pieza del puzzle en su sitio.


La directora ha preferido mantener el juego de sutilezas frente a una resolución explícita. Esto que a muchos puede ser la razón de su malestar con la película, es realmente el punto fuerte de su historia. Bueno, y el otro es el excelente trabajo que realiza Jennifer Lawrence como protagonista de la historia, y el actor John Hawkes que le va a la zaga. Lástima que ambos han coincidido este año con la Natalie Portman de BLACK SWAN (2010) y el Christian Bale de THE FIGHTER (2010), porque si no serían los favoritos a llevarse los más prestigiosos premios de cine.

Sin lugar a dudas, WINTER'S BONE (2010) es una de la películas del 2010 que más me ha sorprendido. Entiendo que a muchos no les haya gustado, tal vez por su naturaleza indie, por su tempo y por sugerir más que mostrar, pero a mí realmente me ha llegado una historia que exige de cualquier espectador que ponga todos sus sentidos para poder extraer la historia que nos cuentan. 

0 Comments:

Post a Comment



 

blogger templates | Make Money Online